La comunicación de forma asertiva es el principal instrumento de entendimiento que tenemos los seres humanos, mediante el cual podemos manifestar nuestras ideas e intenciones para conseguir nuestros objetivos y plasmar correctamente nuestras intenciones, o poner límites cuando estos son necesarios.
Ahora bien, comunicarnos de forma asertiva nos asegura el éxito en nuestras ideas, no por el hecho de que sean exactamente las cosas como queremos, sino porque la asertividad es una habilidad que se basa en el respeto mutuo, es un tipo de comunicación diplomática y eficaz. Al ser asertivo demuestras que te respetas a ti mismo, ya que estás dispuesto a defender tus intereses y a expresar lo que piensas y sientes. También demuestras que eres consciente de los derechos de los demás y estás dispuesto a resolver los conflictos.
En este artículo te compartiremos algunos consejos para que aprendas a comunicarte de manera asertiva.
1: Trata de ser concreto y objetivo
Las ambigüedades y generalizaciones solamente consiguen confundir, por lo que debemos referirnos directamente a lo que queremos. Si nuestra meta es conseguir que nuestra comunicación resulte ser lo más efectiva posible, se requiere que nos expresemos de una manera específica y clara.
2: Mantén un orden cronológico y secuencial
Lo mejor será no abordar varios temas a la vez, es mejor presentarlos en un orden lógico. Una manera sencilla de exponer una temática es estableciendo el siguiente patrón: “dónde, cuándo, cómo y por qué”.
3: Evita ser muy repetitivo
Si insistimos en repetir nuestro mensaje dando muchas explicaciones, podemos hacer percibir a nuestro interlocutor que lo estamos menospreciando; o que entendemos que no es capaz de captar la idea a la primera.
4: Usa el lenguaje corporal.
La comunicación no es solo verbal. Actúa con confianza aunque no la tengas: mantén una postura erguida y haz contacto visual constantemente, no cruces los brazos ni las piernas y mira de frente a la persona. Practica el lenguaje corporal asertivo frente a un espejo o con un amigo o colega.
5: Practica los pasos anteriores
Al principio, practica tus nuevas habilidades en situaciones de bajo riesgo. Por ejemplo, prueba tu asertividad con tu pareja o un amigo antes de abordar una situación difícil en el trabajo. Evalúate después y modifica tu enfoque según sea necesario.
Al ser más asertivo, podrás comenzar a expresar tus verdaderos sentimientos y necesidades con mayor facilidad. Incluso es posible que obtengas mejores resultados de los que esperas.